La perturbadora confesión del padre O’Grady

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El cura Oliver O’Grady era tan cortés en sus modales y tan tierno con los niños que los feligreses de su parroquia se disputaban su afecto.

Le invitaban a cenar y a dormir en sus casas, convencidos de que tener un sacerdote en casa era una bendición divina. Por la noche, cuando todos dormían, O’Grady entraba en las habitaciones de los niños.

De esta manera violó y sodomizó a cientos de ellos, niños y niñas, incluido un bebé de nueve meses. Su espiral de pederastia estaban absolutamente relacionados con los esfuerzos de la Iglesia católica por protegerle a él y a otros como fueron ordenados por instrucciones superiores específicas.

En el video que vemos a continuación observaremos en los primeros minutos una declaración escalofriante de este delincuente.

Más allá de su confesión, es interesante observar la sangre fría con la que relata en el juicio oral cuáles son los niños de su preferencia y cómo hacía para abusarlos.

Un video que ha sido borrado de Internet, que Fundación Adoptar lo ha recuperado de una investigación general sobre este tipo de delitos en el Vaticano y la palabra de un cura explicando ante las cámaras lo que hizo, cómo lo hizo y por qué.

Escribió Julio César Ruiz

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