Experimentos con niños…nada les significó un límite
Hay tres historias: La que relatan los que ganan, la que silencia la derrota y la que permanece oculta porque avergüenza a todos
En noviembre del 2005 publicamos el preámbulo de una constitución, que aunque parecía burda, pintaba a la perfección a una extraña pareja, que desde diciembre del 2003 con la indumentaria de gobernantes se instalaron en la historia política de Argentina como la dominación más corrupta que se recuerde.
Dicho “preámbulo” provocó la sonrisa de todos. Parecía una chanza más que la descripción de la realidad que se vivía, menos aún la premonición de un espectáculo dantesco que estaban dispuestos a protagonizar estos consortes tan sólo conocido él como: “exitoso comerciante” gracias al multimillonario sucesorio venido del padre y a ella como artífices de una organización creada para buscar niños perdidos que terminó cerrando sus puertas por vergüenza, pero sobreseídos por cierto.
Al comienzo de su gestión a los primeros que debieron silenciar fue a unos de los servicios de la Fundación Adoptar. Por supuesto, con tanto poder no les costó demasiado arrebatarnos salvajemente la administración del 102 – El Teléfono del Niño que habíamos traído inéditamente a Tucumán y que nos permitía escuchar a los niños que nos contaban actos perversos contra ellos, de una magnitud que hasta ese entonces nadie podía ni siquiera sospechar…
Incontables casas de explotación sexual de niños administradas por funcionarios públicos, el encubrimiento de la violación seguida de muerte de una niña de 16 año en la casa de una jueza; el ocultamiento de niños muertos por aplicación de drogas no aptas para el consumo humano o inexplicables sucesos de adolescentes muertos por incineración dentro de un organismo del gobierno, fueron tan sólo algunas de la suciedades que ocultaron debajo de una alfombra de tamaño descomunal.
El fin de las organizaciones de la sociedad civil
El primer acto de gobierno de la pareja fue calificar qué persona u organización estaban dispuestas a ser cómplices de sus maniobras. La sumisión de la mayoría y la cooptación económica de los que quedaron, fueron los métodos para desobstruir los caminos hacia la impunidad que hasta hoy con Juan Manzur permanecen activos. Fundación Adoptar, prácticamente en soledad pasó a ser calificada como “peligrosa” porque decían: “atentaba” contra “la estabilidad del gobierno” o “impedía la gobernabilidad”. Nos tildaron de “denunciantes seriales” con lo que transformaron nuestras denuncias escritas de actos graves contra niños, considerado el único recurso civilizado para pedir ayuda en papeles que terminaron en basureros de funcionarios pusilánimes, complacientes y cobardes.
Conformaron una Justicia propia
La concentración del poder la lograron fácilmente: Invadieron la Corte Suprema de Justicia con amigos que les garantizaban protección ilimitada, lo prueba el propio“Daniel Posse miembro de la Corte que fue a la casa de Alperovich a pedirle dinero” . A los dos miembros que les quedaron Antonio Gandur y René Mario Goane no les fue necesario removerlos…son viejos funcionarios mañeros, impúdicos y con probada capacidad para esconder delitos de cualquier magnitud que se lo pida el poder que sea.
El Periodismo
Fue un juego de niños hacer desaparecer al periodismo. Las pautas publicitarias y la compra de voluntades fueron las herramientas fundamentales. A los que se negaban les hacían desaparecer la fuente de trabajo comprándoles los edificios con todo lo de adentro. El miedo y la necesidad de sobrevivir fue más fuerte que el juramento, el brío de la juventud y todos los valores que habían sido argumentos para estudiar periodismo. El abandono de la Sociedad en este sentido fue casi total.
Todo ésto lo dijimos en cada uno de esos momentos. A pesar de ello no logramos la resonancia o el eco suficiente para que el país comprenda lo que nos estaba ocurriendo en Tucumán. Recuerdo..en aquel entonces…
– Todavía no había desaparecido ni muerto Paulina Lebbos, ni había sido necesario que citen a un hijo de Alperovich para comparar su ADN con los rastros encontrados en los restos de la joven, ni sus poderosos padres aún habían debido salir públicamente a defenderlo, ni se había frustrado la compulsa genética por inadecuado cuidado del material encontrado sobre el cadáver, ni todavía la Justicia le había negado el sobreseimiento a este hijo de semejante poder.
– Todavía no habían muerto por incineración niños internos en conflictos con la ley penal dentro del Instituto Roca cuya tutela estaba a cargo del matrimonio gobernante
La sistematicidad de estos hechos, la falta de la detección de responsables que estando a centímetros de los calabozos nunca llegaban a tiempo para sofocar las llamas, la falta de sumarios que determinen quiénes les suministraban los encendedores en una provincia que por ley N° 7575 se prohíbe fumar dentro de dependencia de los tres poderes y las declaraciones del gobernador José Alperovich que este tipo de jóvenes: “son irrecuperables” dejaron la duda pública sobre si estos eventos eran casuales:
Ni siquiera había sospechas. No había trascendido el dolor, ni el olor a sangre ni las lágrimas como para llamar la atención del país, sino tan sólo la muerte de unos cuántos niños y adolescentes arruinados, inservibles a los que nadie extrañaría.
– Todavía no habían ocurrido dentro de ese mismo establecimiento experimentos de características mengelianas como la muerte de niños por aplicación de drogas no aptas para el consumo humano ejecutado por su directora la psiquiatra Susana Viale Hansen que a pesar de la imputación por homicidio de la Justicia, nunca llegó a la condena por homicidio por haberse “extraviado” el expediente que nadie reconstruyó.
– Todavía no se había descubierto que los prostíbulos infantiles eran administrados por policías asociados a funcionarios públicos con la complicidad de la Corte Suprema de Justicia provincial.
– Todavía Juan Manzur Ministro de Salud de la Nación y recientemente proclamado gobernador de Tucumán, no había pergeñado su plan macabro para ocultar cadáveres de cientos de bebés muertos luego de nacer, por la desnutrición de sus madres, ni los más de 22.000 niños con graves secuelas psíquicas y físicas producidas por el hambre.
– Todavía José Alperovich no había descubierto “Un método PeloTudo para medir la desnutrición infantil” (Video)
– Todavía no había muerto Morena una beba de 10 meses que no pudo usar uno de los dos aviones sanitarios de la provincia porque estaban al servicio del matrimonio Alperovich para viajes de placer o para sacar a pasear a la nietita…
– Todavía no se habían estacionado 13 aviones sanitarios de los gobernadores que asistieron a la asunción de Manzur mientras el papá de Gricelda de 5 años con problemas graves respiratorios tenía que adecuar su viejo automóvil para llevar a su hija con oxígeno a ser atendida con urgencia al hospital Garrahan de Buenos Aires.
Todavía la gente no había sufrido tanto, ni aún habían muerto tantos niños. Aún estos mentirosos no estaban escondidos detrás de los vericuetos de las prescripciones o la impunidad de sus nuevos cargos de senador o gobernador.
Los tucumanos que votaron por la continuidad de este régimen saben que para que todo siga igual y continúen siendo favorecidos en este caldo, lo único que tienen que hacer es callar, gozar de las gangas recibidas a costillas de las arcas públicas, enorgullecerse de la vagancia y esperar, esperar por 4, 8, 12 o quizá 16 años a que esta nueva familia, ahora llamada Manzur caiga por su propia putrefacción.
Escribió Julio César Ruiz