Cómo transformarse en Encontrador
Entre los que se buscan hay mamás que les robaron sus hijos al nacer como hijos, que quieren saber de sus mamás y el por qué se las sustrajeron en el momento del parto. Ambos se autodenominan “Buscadores”.
Este término cristaliza o codifica un concepto en el inconsciente, permitiendo una inscripción en el subconsciente de una especie de predestinación de la persona relacionada con la aventura de buscar, buscar y buscar.
Si por el contrario, me auto aliento que soy un Encontrador, el cerebro, decodifica al anterior y coloca en la razón mental una nueva misión: Encontrar, no por casualidad… Encontrar lo que busco.
Por supuesto que alguien dirá: Esta palabra no existe en el diccionario de la Real Academia y eso es cierto, pero, hay muchas que se han incorporado a ese listado como consecuencia que son términos que han producido modificaciones sociales ante nuevas necesidades humanas.
En ese momento, serán tantos los Encontrados y tan pronunciada la palabra, que la Real Academia se verá obligada a definir al Encontrador como…
“Dícese de la madre que Encontró su hijo, a pesar de tanto desánimo o de un hijo que dio con el paradero de la persona que produjo el milagro amoroso de traerlo a la vida”.
Si es mamá coloque siempre en las redes sociales su cara, no la del bebé recién nacido por que pareciera que son todos iguales y por supuesto, nadie a los 30 años se podrá reconocer.
El motivo es simple: Ese bebé que usted Encontrará, vivió 9 meses dentro suyo, compartiendo su alimento, su oxígeno, su sangre, su voz, sus sensaciones, sus alegrías, sus tristezas y si el presta atención, en la fotografía puede reconocer. Sólo tiene que mirar con atención.
Colocar su imagen le significará un estímulo para que el inconsciente que pulula por lugares desconocidos de La Naturaleza humana, genere una serie de conjeturas biológicas para encontrarse con la dueña de aquella casa que lo cobijó durante 270 días y que él abandonó, como lo hacemos todos, sin siquiera mirar atrás para agradecer.
El resto de lo que ocurra, es una cuestión de ustedes dos.
Éxitos
Escribió Julio César Ruiz