El abrazo del oso
Al gobernador de Tucumán, José Alperovich, desde que asumió, en diciembre del 2003, se lo ve cambiado. Se obseva en su vida diaria, que ya no sonríe, ya no anda en bicicleta por las calles de Tucumán como lo hacía antes y permanece recluído, muy probablemente, por temor a que lo escrachen como a su […]